domingo, 30 de diciembre de 2018

La pregunta en el sueño

El cielo tiene los colores del fuego
pero al revés
en esas horas donde miro
la quietud.
¿Cuántos pueden llevar en sus ojos
la expansión del fuego,
la expansión del cielo,
sin disolverse?

escrito en Mar./2017 aprox.

sábado, 29 de diciembre de 2018

Me joden las pertenencias

Todas las horas que encomendé al precipicio
son ahora inventos de un mundo que ya no me pertenece
y al que tampoco pertenecí.
Me joden las pertenencias, cierto.
En otras calles olvidé el infierno.

Hoy me quedo con el espejo del caos.

Lo devoro.

escrito en Jul./2017 aprox.

martes, 18 de diciembre de 2018

Carta de luna

Absorbo todo lo inmenso para poder
escribir al fin el mejor de los poemas
que no es este
ni el próximo, ni el siguiente del próximo que escribiré.
Este es lo no,
lo opaco,
lo intransferible,
lo invisible,
lo intrascendente (incluso).
Desarmo las ramitas del bosque      perpleja,
las sombras murmuran
y yo sigo acá
intentando escribir el mejor poema del mundo,
cosa que ya sabemos que no.

Lo íntegro se encierra en sí mismo para salvarse,
mis manos quedan libres y me sostienen,
me duelen los dedos pero no importa.
Las palabras apenas salen de las piedras,
pequeños verbos, insignificantes,
que sin embargo al unísono causan esta esfera
conmigo adentro.
¿Vendrás por mis sueños a cantarme la nada de la noche azulada,
vendrás a mí por un rato infinito de infinitas formas?
¿Solo vendrás?
Definitivamente no es mi infancia la que me urge,
no la quiero sintetizar en un olvido,
en un globo rojo,
en una rayuela desprolija.
Pero mis símbolos son mi espacio.
Con ellos puedo jugar a estas horas.

¿Vendrás?

Hay mejores poemas,
mejores prosas,
mejores noches que ésta.

Puedo confundir pero nunca desobedecer
a la luz.
Lo más mísero que hay escrito en mis entrañas,
no tiene siquiera una sola línea infinitesimal
que no corresponda a mi alma.
Es lo único que podría pertenecerme:
la nada. El hueco del viento
una vez que pasa y se siente en el rostro.
El silencio después de que culmina un disco de Spinetta.
Ese único segundo de nada. Eso está en mi alma
y es ella misma.
Absorbo todo y, de igual manera, quiero dar todo.
Todo.
Pero ya ves que también me disuelvo en un suspiro,
voy saliendo a respirar afuera,
y guardo algunos instantes
para después.

escrito el 17/Dic./18

martes, 13 de noviembre de 2018

Sin puntos

La meditación el lapsus la entrega
La lluvia el teclado el señuelo
Del tiempo
Y la sangría
De la hoja rota
El domingo precocido
Una melodía
La piedad hacia todos los seres de este mundo

La piedad
La tibieza
La ternura
La piedad

El agua de mis ojos
Mis ojos en el agua
Tus ojos en tu río
Las manos abriendo jaulas
Mujeres pariendo
Brazos brotando

Llanto

Música

Finales
(Siempre abiertos)
Siempre
escrito en Mar./2018 aprox.

miércoles, 7 de noviembre de 2018

Me animo a practicar la nada

Pienso que lo mejor sería ponerme a escribir,
colgar las preguntas en el minutero,
total ese mecanismo no me pertenece
y no me sonroja abatirlo cuando menos lo espera el transcurso de las horas,
pienso que lo mejor sería dejar de asustar a las aristas del cubo
con mis ansias de deformar,
pienso que lo mejor es llevarme a flotar,
hacer la plancha en una realidad de tantas y ver nacer el brote en mi ombligo.
Ya vendrán mensajes pacientes,
ya sobrevolarán respuestas coherentes.
Si hoy no nos pasa, qué importa,
todo tiene su ritmo perfecto aunque nos parezca justo
apurarlos
cuando nos apegamos a lo instantáneo.
Pienso que lo mejor,
a lo mejor,
es sintetizar el hoy y hacerlo zumbido de alas,
meditar con la noche, convertirme en luna,
soltar como viento.
Pero a veces pensar tanto en qué sería lo mejor, también es caer en un pozo
insondable
enfermo
disparado en la caducidad
del ser.
Por eso, me animo a practicar
la nada,
el simple curso
de mi alma como un río,
de mi río como un alma,
de la sutil musicalidad del cielo.
La nada sublime,
la respiración única
del mundo afiebrado
cuando toma su placebo.
escrito en Oct./2018

martes, 6 de noviembre de 2018

splash

las cosas se van nombrando por sí solas mientras
chapotean los niños en las cunetas

alguien trama una broma a su alma mientras le pone burrito al mate

una duda se resuelve en la gota que splash muere tendida rota abandonada esfumándose en el calor

alrededor de todo ello nosotras por explorar
por exprimir
por extirpar

y eso que no nos suelta y sigue vivo
se oye por encima
de los paraguas de los miedosos
escrito el 03/Nov./2018

miércoles, 24 de octubre de 2018

Saudade

Otros movimientos permiten la llegada del fuego.
Lluevo en un desierto, y lo demás,
es puro espejismo.
Nuevamente estoy en una niñez anticipada,
me limpio la tierra de los pómulos,
llamo a mi fantasía para que me envuelva
siento tentación de morir de ternura
y las horas pasan como afiebradas y eternas.
Preciso recorrer cada instante inocente
y perpetuar un poco
de pureza.

Aunque este conjunto de palabras no genere,
siquiera,
una sola idea completa,
aunque sea verano en mis brazos llenos de polvo
y una caspa oscura vaya cubriendo los ojos,
me desperté naciendo desnuda y gritando,
como nacen todos los que
alguna vez
han muerto.
escrito el 16/Oct./2018

domingo, 30 de septiembre de 2018

Re-cordis

Quería encontrar un reflejo, pero mis ojos eran barro seco y por ende oscuridad.
Sin otro rumbo más que el filtrarme en rendijas abiertas del sistema,
me dejé llevar por todo lo que parece absurdo para la razón.
Animal terrestre y con sangre hirviendo,
me fui sacando las partes como el águila escondida
en una caverna
eligiendo el cambio antes que la muerte.
Pero no se vence la sed tan fácilmente.
Hay en el medio un sinfín de ríos que desembocan en demasiados mares,
todos diferentes
todos nuevos.
Si tengo que observar los caminos que transité hasta ahora,
me pierdo,
ya no me reconozco entonces tampoco puedo verme en ellos.
Acudo seguido a la nostalgia para observarme antigua
y sin arrancarme más capas que provoquen mi derrumbe,
el ahora
baila inmenso
entre las redes energéticas que recorren el universo.
No sé qué hechizo me trajo hasta este preciso segundo
tampoco sé hacia dónde me llevará el segundo siguiente,
el barro seco se fue rompiendo pero aún queda resto,
y hay una puerta dentro mío,
que late, llora sangre, devora e inflama
hasta el punto en el que necesito gritar para no asfixiarme.

¿En qué otro cruce del universo se disuelve
la energía que hoy me está atravesando violentamente,
para así equilibrar el mundo?

Una flor cayó en mi cabeza desde la copa más alta.
Y no cerré los ojos nunca más.
escrito el 24/Sep./2018

sábado, 29 de septiembre de 2018

Que nadie

Que nadie vuelva que nadie imponga
que nadie intente soslayar la cotidianeidad,
esa maquinaria que nos hace apagar alarmas con la mano dormida,
que nos hace ver en una ventana la vuelta del sol,
que nos recorre con un algoritmo programado
y nos ordena si - según - mientras que - repetir hasta,
que nadie pretenda la revolución de nadie,
    para que exista el vientre
en el que nos recostamos a nacer de nuevo,

que no necesitemos el regreso de nada, de ninguna forma conocida
para enredarnos con el fuego.

Que nos brote en los dedos el entusiasmo,
que cada noche sea una agonía,
que no confiemos en los dictados,
que no tengamos filtro.
Que nos pique el infinito
que nos rasquemos.
Y no preguntemos dónde cómo ni cuándo
encontraremos el sentido,
que solo acabemos el cuadro
escupamos los rezos
caminemos sin culpa.

escrito el 25/Sep./2018

domingo, 5 de agosto de 2018

con el cuerpo entero

Te bendigo con mi lengua esta noche y cada noche,
te deseo el deseo que no cosecha dolor.
Agua emano de tu mano.
Nada adoro tanto como el fuego.
Cae una noche y es cada noche en un instante único,
en el cual te bendigo con mi lengua y se hace tarde,
y se hace primavera y se hace tiempo mendigo.
El foco de la esquina envidia la luz de estrella fugaz.
Y hará cada estrella su viaje prometido,
vos en uno de ellos vas entrando al ensueño,
mientras con el cuerpo entero yo te bendigo.
escrito en Sep./2017 aprox.

viernes, 13 de julio de 2018

tejimos una constante

radiante porque brilla radiante porque muere
esta dicotomía me afecta el astral y
me enjaula en un pensamiento que se loopea
él se mostró siempre conciso y directo
algo similar a lo que me ocurre cuando estoy con
el síndrome premenstrual
la dialéctica de la verdad
dictada por hombres que no saben nada de nada
pero verdad al fin pero dialéctica al fin
el lenguaje no nos hace héroes
incluso nos encarcela las mentes cuando
el canal de transmisión es errático
o simplemente distinto a todos los canales conocidos
tejimos una constante
en la retroalimentación
dicha constante se muestra apenas
pero se brinda plena con el tacto
y a veces la telepatía
surge como entidad solemne e irrefrenable
y me lee la mente como si fuera un libro
de borges así de laberíntico me comprende
me saborea
y yo solo silbo bajito un canto
y me vuelvo radiante porque brillo
radiante porque muero
escrito el 04/Jul./2018

miércoles, 4 de julio de 2018

Multi versos

Multiversos
multi-versos
varios universos coexistiendo
varios poemas para describir el mundo
varios mundos con los que hago y deshago poemas
varios universos donde puedo descifrar el verbo
varios poemas donde puedo incubar un mundo nuevo
varios poemas multiplicando lo que somos
varios universos interpretando de distintas maneras un verso
varios paralelismos conscientes llenos de palabras que nos crean
planos que se multiplican
visiones que se expanden...
la palabra que hoy me transpola
y que mañana significa el todo
y que mañana significa algo
y que mañana deja de significar
y que mañana
infinito
escrito en Jun./2017 aprox.

jueves, 28 de junio de 2018

Después de

Parámetros de siesta
ventana rota
trasluz leve
cabellos desparramados
lluvia anciana
mediodía cautivo
calambres en el pecho
convulsión inmaculada

así el día
después
de
vos
escrito en Jun./2017 aprox.

viernes, 8 de junio de 2018

Enigma yin

Es que cuando enciendo la luz, se enciende tu letra
y cuando se enciende tu letra
devora el espacio de la mía.
Así funciona, así se enciende.
La luz.
Shine.
Brillás, a leguas, a treguas, pero
cuando enciendo la luz, se encienden
las oscuridades que portamos,
esas que solemos esconder tímidamente
cuando decidimos regalar a otros más brillos para su suerte.

Cuando enciendo mi letra, se enciende la luz
del cuarto de la tuya.
Y se asemejan a cubos los focos que fosforecen
hacia varias direcciones.
Cuando enciendo la luz, se enciende la palabra
y la palabra sólo es un tonto juego
de estrellas que iluminan.
escrito en Ene./2017 aprox.

sábado, 12 de mayo de 2018

los principios

alguna vez vislumbramos los principios
se soplaban fuertes los terrenos
alguien nos dijo que nos bendecía una lluvia
otro alguien nos bañó con humo de palo santo
pequeños chamanes se inclinaban a nuestro alrededor
caminamos los principios
las danzas alrededor del fuego se producían
en las horas exactas
no había horas
la luna giraba musicalizando el comienzo
los rituales resonaban en las almas encontradas
una luz en el tercer ojo nos dictó los secretos
algo se nos despertó hacia la glándula pineal
seres que nunca vimos pero que siempre percibimos
nos cristalizaron los frutos
azúcar sentimos en las lenguas
mares en los oídos
suavidad en la carne
todo fue revelado
cada hilo
cada camino laberinto
todo estaba a la vista
vislumbramos los principios
un duende nos susurró
que morirían los finales
escrito el 12/May./2018

jueves, 3 de mayo de 2018

Adièu

Y con esto me despido
hasta siempre
hasta nunca
hasta donde el sol no existe
hasta alguna primavera donde nazca
una flor que no se opaque
ni se brinde tanto,
solo sea,
y con esto me despido
es una celebración, como la muerte
aunque nos dé miedo celebrarla
y con esto me despido,
entierro la historia en un pozo de arena,
encima construyo un castillito
al cual le pega el atardecer en los bordes
y con esto me despido
en un malambo psíquico relativo
arisco y sereno a la vez
arácnido de patas largas
así me presto a este momento ido
y con esto me despido
y con esto
me despido
escrito el 02/May./2018

miércoles, 2 de mayo de 2018

Caídos

Erotismo en líneas finas, zapatos de poesía,
mugre doliente de palabras,
vasto emblema de un sol que alumbra a los ciegos
de mediocridad.

Sólo somos
caídos...
del cielo, no creo
pero sí de la nebulosa
que recubre y envuelve todos los rezos hacia él.
escrito en Feb./2017 aprox.

martes, 24 de abril de 2018

Aniquilación del tiempo

Mediqué a mi propia suerte con el antibiótico contra el tiempo.
Ya no entiendo los minuteros, y los caminos
se abren con el mismo desdén
que las agujas sobre el agua.
El recetario cantó lo justo: nada pertenece al pasado, nada pertenece al futuro.
Solo el verbo necesita de él para hacerse vida.
escrito en Abr./2018

sábado, 21 de abril de 2018

Esta es mi respuesta

Amanezco poesía en tus manos
La lengua cuenco trae el brebaje
Te recreaste
Para sanarme
Ahora estoy curada de mí
El más hiriente fantasma
A veces enloquezco pero
Tarde o temprano regreso
Y ahi estás (de nuevo)
Parado
Recostado sobre una columna
Esperando que baje y te cuente
Los secretos de mi espesa llave
Dios por qué acaso repito tantas veces
La palabra dios
Como una exclamación
Una fiebre
Algo más que la explosión
Y ahí estás de nuevo
Como siempre
Camino a darme lo mejor del infinito
escrito en Jun./2017 aprox.

viernes, 20 de abril de 2018

Los complementos

Parezco una perseguidora de utopías a través de un río
cuyo bracito llega hasta mi pueblo
y la utopía tiene forma de barrilete
y sé que aquello luminoso en el río de noche, del otro lado, es Bella Vista.
Y me desnudo y voy corriendo hasta la arena
donde me tiro cara al cielo y veo una galaxia completa
porque la oscuridad se traga todo y no convida, dice Cabrera,
pero la oscuridad en este lugar
me convida constelaciones que no veo en la ciudad.
Sin embargo, la luz altísima
devora solo los peldaños del tiempo,
y no convida el universo:
lo hace piel de todos y fecundador del amor.
escrito en Dic./2017 aprox.

jueves, 19 de abril de 2018

Idiomas

Las flores de mi boca ya fueron hasta tu boca
en forma de onda bifurcada, serie de paréntesis que dicen nada,
hasta beberme a mí misma en tu boca
disociarme a cuentagotas en tormentosos vientos.
Transformando la piel en esponjas naturales
en vacíos receptivos
en manos que me tocan me tocan me tocan mil manos
que me rehacen.
Mi piel derrama arcilla fresca, mientras me dibujas los pliegues y las sombras,
el fruto de mi cuerpo y sus semillas,
en el cual vas a regar con tu miel la magia y el ritual
de millones de tribus que vivieron y viven
en cada parte perdida de continentes lejanos,
donde huelen a bosque, a mar, a humos de palo santo
donde observan seres extraños de otras dimensiones llegar en el cielo,
donde observan el cielo y lo describen en idiomas que ahora entendemos porque nos dejamos fluir.
Logbeki es la estrella de tu alma.
Oknwlapo es la caída terrestre de los astros (por ejemplo, allí, a tu lado, acaba de caer un magnetar).
Guuhka es la simbiosis entre la eternidad y las nubes que la persiguen.
Pkwijobb es el elemento esencial de toda vida.
Lkoimo es el rayo violeta de la tormenta.
Lonbkga es el sol escondiéndose en el horizonte de nuestros ojos.
Cafgripo es la negrura pre lluvia en invierno.
Hdkidi sos vos sos vos sos vos que sos todos los cielos juntos en un mismo instante cuanto me tocas y te toco cuando te miro a los ojos cuando cielo sos cuando las flores de tu boca ya no están.
escrito en Abr./2017 aprox.

miércoles, 18 de abril de 2018

El fango de la suerte inquieta

Y si huele a río tu mano rozando
una de mis piernas.
Y si huele a río la siesta propinada
por las voces
y las almas de un nuevo día.
Y si huele a río el paso tranquilo
de la creación.
Y si huele a río un disco que suena despacio
en auriculares viajeros
que mezclan dos mundos.
Y si todo huele a río porque el río está cerca,
creceré como el cielo para ver uno a uno
los peces que sentencien
el algoritmo ambicioso del deseo.
Y si todo huele a río quiero volver a ser agua
dulce y preciada, ruidosa,
recostándose en tu barco.
escrito en Mar./2017 aprox.

lunes, 9 de abril de 2018

Soy el poeta

Sacudió el libro lleno de tierra
leyó cada palabra como consumiendo mundos
hambriento
petrificó sus miedos y los tiró
en una bolsa de residuos.
Era de lo más lindo verlo leer entusiasmado
inmerso en el viaje paciente de la imaginación,
todo eso
me invitaba de a ratos a vencerme
porque no hay nadie que pueda
contra las palabras escritas así
cual hechizo sangrante de misterio.
Y después el hechizo pasó a ser parte de lo real,
de la cocina, de la mesada, del mate nuevo,
de la mano en mi cintura y de las palabras ahora dichas,
"...Debo justificar lo que me hiere
no importa mi ventura o mi desventura,
soy el poeta";
así le cabía Borges en una mano y en una boca
la sentencia de la fantasía en la que yo termino creyendo
como bolilla de sorteo que siempre es buena suerte
y es anhelo y ya no importan las letras,
y no importa vencerme porque igual gano en el podio el mayor misterio,
la mejor locura,
ningún premio, todos los premios, ningún hechizo,
todos y cada uno de ellos,
el libro ahora limpio, casi sin polvo en su tapa,
la cama revuelta
la magia cerrándonos la puerta.
escrito en Dic./2016 aprox.

domingo, 8 de abril de 2018

Palabras medio, palabras camino

Podría decir con vehemencia que encontré la salvación en un trozo de instante.
Podría decir con seguridad que los kilómetros son la nada misma, que la distancia pierde su sentido y concepto como tal en esta sintonía.
Podría decir con exaltación que encontré la llave del mandala y giré hacia él, como laberinto y como apertura, como un río metafísico, como dualidad sin quietud.
Podría decir todo lo que el lenguaje me permita, con palabras simples como los días.

Podría también callar,
perdurar y ser vidente, confiarme,
creer que todo está dicho.

Podría empezar a gritar los verbos que lo envuelven y sonreír cuando deba llorar para confundir al aire y sentirme lluvia caprichosa.
Podría verlo inmenso y febril, sobre mis pechos, mirándome como si mirara una pintura de Klimt y sus ojos estuvieran llenos de oro.
Podría reconocerlo aun entre millones de personas y personajes con solo cerrar los ojos y visualizarlo como yo quiero; los abriría y allí estaría, frente a mí.
Podría regar con savia sus filamentos más nobles y rogarle que sea mar para lamer su sal y ahogarme por siempre en él.
Podría inventar el siempre y que la eternidad se llame infinito y se apellide hoy.
Podría hacer todo lo que siempre pude, pero no sabía que podía hacerlo y entonces ¡eureka! puedo porque lo amo y lo amo porque puedo amar todo lo que se abra como el cielo, todo lo que se libere como el instinto, todo lo que se absuelva como el viento, todo lo que vuele como las semillas, todo lo que renazca en el arte y brille candente con su tercer ojo.
Podría dejar de escribir sobre esto y sólo sumergirme en él como hago desde hace siglos... Las partículas se han encontrado, el entrelazamiento cuántico perenne ha desembocado en armonía, podría dejar de escribir sobre esto, pero las palabras trajeron a nuestras almas al reencuentro, y entonces palabras medio, palabras camino, palabras tránsito y palabras destino, siempre serán el amuleto.
escrito en Sep./2017 aprox.

viernes, 6 de abril de 2018

Hvarf

Desaparecer detrás de la nada
que viene escapando del todo,
hacer una pirueta en el aire y caer
hacia arriba.
El todo gana, envuelve,
la nada queda, se transparenta.
Desaparecer de lo que parece,
actuar en lo que posee parecido,
reaparecer en la última
luz
del
ocaso.
Desaparecer de la manada y hacerme
huérfana
del todo.
Eso quiero.
escrito el 04/Abr./2018

miércoles, 4 de abril de 2018

Soy lo que soñé hace siglos

Otra noche penetrante de grillos
acude a lastimarme con su santo uniforme.
¿Dónde dormiría mi enorme franqueza?

Soy lo que soñé hace siglos;
te vi llegar y me anestesié de verbos.
Hablame
vestime de mantras
que necesito algo más que el ruido.

Me acabo de derrumbar la puerta,
salí de mí y descubrí una niña,
cuando mujer se devora,
cuando púber se enreda,
cuando pequeña se evapora.
Dame un centavo de deseo
que yo lo hago voraz fuego.

Así son las cosas, piedad.
Me dicta un grillo su prosa;
yo sólo le encomiendo la muerte.
escrito en May./2017 aprox.

viernes, 16 de marzo de 2018

Del baúl de los re-cuerdos 3

Alguien le indicó a aquel hombre la unívoca salida de la realidad.
Dicho hombre, asomó con ansias.
Dicho hombre, escaló.
Pronunció mil veces la palabra ahora,
luego, se golpeó el pecho con el puño herido de cristales rotos.
Aquel hombre comenzó su aventura.

A pocos kilómetros, perdió la cordura.
Ya no veía las quimeras celestes.
Quiso perderlo todo, y se quedó con migajas
del espejo con cuadrículas que medía su frente.

Alcanzó a reír con demencia en la segunda caída,
las rodillas peladas, la cara llena de tierra,
no importaba más que el ahora sin pausa
pero el precio era perderse de lo conocido y de la conciencia.

No llegó desarmado, pero sí agonizante, a la séptima maravilla.
Yo lo miré asombrada, como si tuviera alas.
Con una mano le dibujé la sal en los poros,
con la otra me borré y dejé que él me olvidara.
escrito el 8/Mar./2018

jueves, 15 de marzo de 2018

Del baúl de los re-cuerdos 2

El otro día me impuse ante los maullidos.

No hacía falta ningún pelo negro, Reymon. Estás tan vulnerable como yo, chiquitín.
Pero vos clavás tus garras en mis piernas y yo solo lloro ante la crueldad de la inmundicia conformista.

Mutame,
oxidame.
Dame.
No uses el laberíntico manejo de mis redes neuronales.
Soy más compleja de lo que notás, negrito.

Entre las penumbras, escuché voces. No, ladridos no, voces.
Como las de las luciérnagas en esa anochecida senda del Uritorco.
Bueno, ya sé que las luciérnagas no emiten voces sino luces.
Pero es lo mismo. Comprenderás,
que la iluminación es partidaria de la oscuridad
porque la necesita.
Bueno, eso.
Y las voces no callaron hasta el mes siguiente del año anterior.
Sí, hablo de meses y años pero no gregorianos.
No sé quién era ese tal Gregorio porque no me importa.
Me importa
aquella garra
que deslizo
cuando me asqueo de la suavidad.

¿Que con quién estoy hablando?
No sé, pensé que era con vos.
Siempre equivoco el oído que escucha.
Siempre equivoco el oído que no oye.
escrito el 8/Mar./2018

martes, 13 de marzo de 2018

Del baúl de los re-cuerdos 1

Un loco trastabilla con la inercia.
Mientras lo observo, fantaseo.

El loco soy yo y es otros tantos
heridos en la nebulosa.
Como una sombra, ejecuta su inexistencia.

¡Qué bien huelen los limones!,
exclama el loco que suda esta siesta.
Vaya a saber uno qué ha buscado en la maraña
de la mañana,
que ahora aspira limones y seduce a las palomas.

Ay de mí, loco, la casi cuerda.
La más cuerda de las sogas.
¿Me atás con ella en el pertinente letargo de tus labios?

Por acá soy tan continua,
tan arrancada del piso,
y todo huele tan mal, tan mal
que ahora anhelo limones.
escrito el 8/Mar./2018

sábado, 24 de febrero de 2018

A M.

Rimbaud como un niño vidente sin barrilete ni globo y, sin embargo, con un juego hipnótico de palabras (¿querés jugar vos también, alma?), un Lennon para descubrir, un disco fantasíadoble (porque "si no hay amor, que no haya nada entonces"), tu mente que es una mente de diamante como tu alma (tu mente me seduce, envuelve y alegra), la pasión y el dolor como mecanismos sin estructura y, sin embargo, tan fuertes, tan potentes y eficientes para la sensibilidad de tus ojos, tus manos, tu lengua, tus oídos, ¡tus sentidos! que me animo a decir "¡como los míos!", así de abiertos al mundo, así de cerrados a la bazofia, así de abiertos a la poesía de la vida (esa que no siempre está escrita en un libro),  así de cerrados a lo normal, así de abiertos a lo invisible, me siento así de abierta y febril hablando con tu mente y con tu corazón.
A veces es un viaje nuevo, a veces un regreso, pero eso sí, siempre es un movimiento, siempre conmigo, un movimiento intenso que devora todo, el pasado reducido a la nada misma, el futuro que llegó hace rato y el presente que no existe y, sin embargo, lo siento como una mariposa a punto de morir, que está llena de colores, y que vuela y se reproduce y bebe néctar y se va y vuelve y aletea y jamás se pregunta qué hace la mierda en esa esquina sino que la convierte y le saca la esencia de mierda para ser un factor más improvisado en la maraña de cosas que nos rodean pero...ES. ES, como vos y como yo, llorando por un desconcierto de concierto que nunca más vivirá si creemos en las palabras y las melodías.
Y yo sé que vos creés. Y yo sé que yo creo. Sino, no estaríamos recordando a Rimbaud ni traduciendo a Lennon, ni llorando.

escrito en Mar./2017 aprox.

miércoles, 21 de febrero de 2018

Invertida

La espiral que indica el nacimiento del cosmos
busca converger hacia una lluvia de triángulos invertidos,
como los cielos invertidos desde donde nacen nuestras raíces
y aquellas tierras a las que llegamos hurgando en lo alto.

El latido sale de la cadena,

el ojo fijo sale de la cadena,

el universo comienza con el final de la cadena…

Caen pétalos
caen pétalos
cualquier tallo me duplica en tamaño
caen pétalos sobre mi cabeza.

La espiral que da nacimiento al cosmos

me lleva hacia adentro.
escrito en Jul./2017 aprox.

lunes, 19 de febrero de 2018

No hay nada que la apague

La voz recorre los pasillos blancos,
gira en torno a las sillas inmóviles
y atraviesa, atenuada, la puerta central,
que tiene sus vidrios empañados y azules,
porque el frío azotó su madrugada
y ahora el sol le devuelve el calor en forma de agua.
La voz traspasa los árboles más jóvenes,
y devora el canto del pájaro que ahora escapa.
Llega hasta el camino rodeado de pasto,
lucha contra el ruido de la ruta,
pervertida de camiones, colectivos y autos,
minada de dureza gris y señales de tránsito.
Cae lentamente en mis oídos,
absuelve las voces anteriores,
eleva el volumen y se presenta enérgica,
me susurra en los tímpanos las verdades ocultas.
Ha viajado a través de eras y siglos,
me cuenta detalles de cada uno de ellos,
hasta que llega al momento de mi nacimiento y me nombra,
no como palabra, sino como sonido,
a partir de lo cual, formo parte
de los complejos acordes de la vida.
Nadie sabe con qué voz se encuentra
en el momento adecuado,
nadie sabe de dónde sale la voz
y por qué aparece.
Sólo se conoce su precisión y prolijidad
para envolver la mente y proveer calma.
Algunos creen que es una voz interior,
otros teorizan con la voz del mundo.
Algunos creen que oírla es aterrizar en la demencia.
Yo creo en ella porque no hay nada que la apague.
escrito en Ago./2017 aprox.

domingo, 18 de febrero de 2018

Ahora off

Hoy es feriado, un pseudo domingo
yo busco un interruptor
On Off

{{{Algo que me desconecte}}}

Necesito terminar lo que empecé,
necesito dejar de coartarme las voluntades de las entrañas
y sacudir las migas de plomo de los hombros.

Necesito dejar de necesitar.

Podría viajar hacia lo enorme y fingir
que aún puedo fingir,
solo para jugar a que nada sea cierto,
una vez más.
Y cuando la verdad sea manifestación por sí misma y no misterio,
(ahora on, ahora off),
mi lengua hablará por todo
y no tendré que saborear más los escalofríos de pseudo domingo.

En verdad
   No
      Importa
         El día

Importa la putrefacción de mi anterior yo
que terminé de comprender y conocer

(siempre pasa, cuando uno se termina de conocer, ya es otro).

On off.
Empezar
acabar.
escrito en Abr./2017 aprox.

lunes, 12 de febrero de 2018

Remeras todas tus adoro

¿Tendrás tanto cielo en tus palabras porque el cielo te fecunda?
¿Tendrás tanto cielo en tus venas porque te concedieron un cuerpo las nubes?

¿Tendrás tanto cielo en el alma
porque
yo te cielo
es decir
te amoazul
te amo amor amarillo
te amo derritiendo la tierra con el rayo herido naranja ultravioleta del sol?

¿Tendrás tanto
       Hola
cielo en tu vida
       Hola
que ya no sabés si llovés
       Hola
o iluminás
       Hola
o nublás
       Hola
o abarcás el todo, omnipresente y telepático
       Hola
y te estirás y te expandís
como una llegada esperada desde siempre?
      Hola

¿Estás sonriendo o te crecen estrellas fugaces?
escrito en Oct./2017 aprox.

sábado, 10 de febrero de 2018

Las preguntas

Cada día caleidoscopio presenta un patrón nuevo de colores y formas que se devora y se recrea en nuestros ojos soles diminutos como estrellas volcanes.
Sobre ello, hay que tejer. Tejer amistades fuego con el alma del mundo, vaciar penas olvido con una barrida astral, corromper las jerarquías leyes y matar el odio lenguaje.
Pronombres y verbos acompañan estos días sustantivos.
Hoy vos cenit, mañana yo lago. Dos puntos que se unen en un rayo tangente.
Y las preguntas, siempre las preguntas, respondiéndose en el viento alas.
escrito en May./2017 aprox.

viernes, 9 de febrero de 2018

En caso de emergencia

En caso de emergencia,
rompa el vidrio de la rutina
con el martillo de la juventud.
Tire hacia afuera los métodos
y abra las puertas de la percepción manualmente.

En caso de emergencia
siga los carteles de evacuación
ascienda del subsuelo de su propia peste
hágase héroe y traidor de sus propias convicciones,
rompa
las cadenas,
corra
con los pies alados,
asegúrese
de liberar lo pesado
y corra, corra más, corra sin parar
tras la vida que, en caso de emergencia,
sabe a agonía.
escrito en Mar./2017 aprox.

miércoles, 31 de enero de 2018

¿Te gusta la constante de Boltzman?

"Hola, ¿cómo estás?", qué pregunta más inútil
para comenzar a hablar
sería quizás mejor esbozar un
"¿Cuántas veces te suicidaste?"
"¿En qué pensás cuando comés tarta de acelga?"
"¿Alguna vez soñaste con un loro que rapea?"
"¿Existirá algún país donde coman bichos bolita?"
"¿Viste que siempre tiene que existir un país donde coman cosas raras?"
"¿Te gustaría ser un helicóptero en otra vida?"
"¿Cómo se llama tu almohada?"
"¿Alguna vez rompiste un cajero del banco?"
"¿Te gusta la constante de Boltzman?"
Hola, cómo estás.
No cabe respuesta sincera, ni frase en la cual se pueda confiar.
No sirve.
Ahora bien, "hola, quién sos ahora", podría ser una buena manera de terminar con la farsa, pero... No, imposible.
Cómo preguntar eso si hasta ayer yo fui algo que no soy ya. Qué complicado.
¿Sos vos, estás seguro? ¿sos vos el mismo de esta mañana,
sos el mismo que hace dos minutos?
En caso afirmativo, responda Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed eiusmod tempor incidunt ut labore et dolore magna aliqua.
En caso negativo, responda Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed eiusmod tempor incidunt ut labore et dolore magna aliqua.
escrito en Ene./2017 aprox.

jueves, 25 de enero de 2018

Oniris

Me incorporo en este sueño
me siento como una pizca de marea, de movimiento
entiendo las voces que me hablan
aunque no se desnuden del todo,
me pierdo en el paraíso de los dormidos,
soy el sueño anudado en tu almohada
soy mi sueño intentando cubrir lo real
soy una crisis de vida y una muerte de puntos suspensivos,
me reservo la fiebre
te la presto, a veces
disuelvo mis papilas gustativas en miel
camino campos, olfateo brumas,
enciendo una luz sobre mi cabeza,
visualizo el tiempo.
escrito en Ene./2017 aprox.

miércoles, 24 de enero de 2018

Amor de Calíope

Soy dueña de un amor supremo,
un amor que me traspasa, me inunda,
chorrea sobre mi epidermis y se esparce
en cada cosa que toco y que hago.
Soy dueña de un amor elástico y expansivo
que licúa mis sentidos sin atormentarlos,
que crece cuando duermo y que se reproduce cuando beso,
cuando canto, cuando escribo, cuando cocino, cuando trabajo,
cuando abrazo, cuando escucho, cuando leo, cuando encuentro.
Soy dueña de un amor infinito, cuya sed es verdadera.
Soy dueña de un amor perenne y consciente, abierto a todas las posibilidades del universo,
existente en todos los planos y alado en la inmensidad,
que renace cada día con más vuelo y más fuerza.
Soy dueña de un amor que no me hace dueña de nada.
escrito en Sep./2017 aprox.

domingo, 21 de enero de 2018

Allí está el secreto

Caída libre y voltereta. En eso resultó la vida.
Calaveras mirando al cielo,
misterio constante, claroscuro de viento.
Caída libre y dimensión áurea,
en eso resultó la vida.
Contemplación acorde a los tiempos (que no son los que corren).
Caída libre pero no por eso mortal.
Allí está el secreto.
No basta con saberse cayendo,
hace falta la liviandad. Es nuestra única salida.
Si caemos pesados, la fuerza de gravedad
nos hace picadillo contra el suelo.
En cambio si somos livianos,
la caída no parece fatal
y se transforma en vuelo, como globo, como hoja, como bolsa de nylon, como pluma.
Caída libre igual a vuelo.
En eso resultó la vida.
escrito en Oct./2017 aprox.

viernes, 19 de enero de 2018

Ante la bruma

No supe qué hacer ante la bruma.
Mis dedos jugaron con las teclas
de una infame computadora
y mis oídos agradecieron la melodía
demente y rugosa de Heroin.
Cuando Lou Reed acalló mis pensamientos más superficiales
y me adentré en el viaje,
no supe bien qué hacer ante la bruma
y oré en voz alta hacia los cielos
con una serie de mantras recitados al revés
y los brazos estirados en cruz
abiertos al devenir de lo que quiera manifestarse.
Improvisé un mecanismo
para proveerme calma,
someter a mi ansiedad
y que no me falte el respeto.
Funciona a veces, cuando te nombro,
y otras no funciona, pero también te nombro.
Soy un manojo de repuestos de fe sin ruta
y cuando encuentro un guía, siempre es estrella
y está lejos pero alumbra.
Soy un manojo de pieles envueltas
y nunca sé qué hacer ante la bruma.
escrito en Ago./2017 aprox.

miércoles, 17 de enero de 2018

Edad de transición

Mis mecanismos no funcionan como antes.

Podría correr decenas de kilómetros o acostarme al sol por horas hasta quemarme la piel con la misma inercia.
Mi edad de transición me desarma del lenguaje, ese al que tanto me até para entender y darme a entender.

Ahora mismo, todo lo que aparece en mi mente es imposible de empaquetar bajo el lenguaje.
Y vos, elocuente
verbalizando las previsiones de tu mente
al traducirlas todo es sideral, global y real,
como ver la malla de hilos que tejen los planos en los que nos movemos, como ver el sinuoso retazo de nada entre la fantasía y la realidad.

Estar ahí, en la transición, en el movimiento, en la ruptura, en el desorden previo al nuevo orden, en la fusión, en el paralelo donde se mezclan dos lenguas, en el intersticio.

Entonces no tengo elocuencia porque tampoco tengo palabras.

Sólo tengo mi mente que explota para renacer y no acaba de hacerlo que explota nuevamente, y la implosión de conceptos y de puntos de fuga y de paréntesis se ejecuta de manera ordenada pero random, como un azar medianamente estipulado, como una probabilidad cuántica.
escrito en Nov./2017

martes, 16 de enero de 2018

Por más muerto que parezca el tiempo

y das pasos firmes, o eso creés y te lo recordás a cada instante
y te encontrás con el deseo y la premonición,
te encontrás con todo, con un escenario
te encontrás con cosas que estás a punto de dejar,
y una mañana de frío ves un tipo vestido de papá noel
saliendo de una verdulería
y pensás qué bizarro mundo qué bizarro mundo
es este
y te reís y te sumás a la bizarreada
porque te funciona bailar y caerte
o te funciona sentirte ridícula
porque te parece sano reírte un ratito de vos misma
y darte ternura;
o te encontrás leyendo cosas de extraños paralelismos
y se lo contás a alguien entusiasmada
porque lo importante en tu vida cabe en una sola línea
y no es una cosa tangible
y después, das vuelta el río paraná
como si fuera una palangana llena de agua
y te mojás de calor;
o te fundís en la chapa de un chaco corrientes
con un vestido corto bajo el cual
tuviste el cuidado de ponerte un short
porque hay viento y escaleras y hacés
la marilyn monroe en la parada del puerto,
o te acomodás la ansiedad en el costado
y la disimulás,
para luego meterte de lleno al otra vez bizarro
momento de toparte con eso
que ya conocés pero no,
y de golpe la tierra que no es esférica sino plana
gira
igual
aunque el horizonte parezca el mismo
y ahora tengas en una contractura los recuerdos de la madera
y del flaco
y del amor semilla;
o tal vez, busques en el calendario los símbolos mayas
para saber que la magia y la visión
casi que se necesitan,
y te alegre
y te estimes
(por fin)
y te sofoque la alegría,
y te separes de tu propio cuerpo
y flashees viaje astral,
y te veas, paralela al piso, sublime
y te agradezcas;
o quizás te bebas como en una poción, aturdida
de tantos espasmos mentales
de tanto aprendizaje junto
que casi que te sorprende verte ahora en un espejo
y no juzgarte,
o quizás cada mirada en el espejo sea una novedad
porque sí
porque te sentís nueva, qué digo hace meses, qué digo
hace días, qué digo hace horas,
sos nueva hace un segundo, y lo serás en el segundo siguiente;
o acaso un día despiertes sabiendo que de verdad te fuiste
de verdad hay un alma,
de verdad diste un beso, de verdad diste una caricia,
por más muerto que parezca el tiempo,
por más discusiones que tengas con tu propio cerebro,
por más minúscula que te hayas sentido,
ahora no, ahora simplemente todo sucede;
o seguramente estés en el camino correcto
que siempre es el que tiene corazón
y entonces lo ponés entre tus manos como ofrenda,
aunque se frite con el sol
aunque se te caiga y ruede por la tierra
aunque no siempre todo sea un juego;
o tal vez una madrugada vueles pero de verdad
y aterrices donde ya estás con el espíritu
y te reciba un aire fresco y el sol,
y nada te atosigue, y todo te alegre
y aunque no exista un hotel llamado love
como el de enter the void,
le inventás las luces de neón con tus pechos,
alumbrás la tarde que se va con sonido de tren,
te aprendés de memoria
el grito de una ciudad de cemento,
y te acomodás para sentir su piel en un parque;
o, puede que te propongas
sacudirte el cabello
y descalzarte otra vez,
y denunciar las deshoras, respetar las subidas y las bajadas,
arreglarte el cielo
amar
amar hasta morir
escrito en Dic./2017 aprox.

lunes, 15 de enero de 2018

In-finitud

Andar como las luces, viajando en tus ojos
necesitar la vívida sed
para culparla y amarla,
despertar en el caos que encierra tu mente y recorrer su laberinto,
calmar los reflejos, insistir en el agua, nadarte.

Andar como las luces, llegando lejos,
perpetuarme en los prismas, en los espejos,
en las burbujas de detergente,
reventarlas saltando como niños,
visualizar en ellas todos los arcoiris
que existieron en el cielo en estos siglos,
girar y marearme,
saludar a la parte mía que abandono.

Andar como las luces
atravesando tu transparencia.

Te invito a recorrer conmigo
la cinta de Moebius.
escrito en Feb./2017 aprox.

domingo, 14 de enero de 2018

A que no te animás

Una mano toma otra,
electriza la palma con su palma,
cuenta los dedos con sus dedos,
llueve y da de llover mientras una guitarra
sonando nubla el techo-cielo,
resuenan cantatas para puentes en las huellas digitales, sales,
serpientes sin veneno, desiertos prometen
tacto y hastío, altas temperaturas y oscilaciones,
un safari espontáneo, visiones de fauna, leones durmientes,
estanques, monos y tigres (tigres que se ven en la lluvia de Spinetta)
sí, todo llueve
el pliegue, la yema, las líneas de la mano contando secretos.
A que no te animás a encender el fuego
desafía una de las manos a la otra,
a que no ardés, a que llueve en la mecha
primeriza y consternada de la noche.
A que sí, dice la otra.
Y el juego comienza pronto.
Una mano toma otra y se calcinan en el viaje
y una se ríe, y la otra consigue el vuelo
y las agujas del reloj frenan como dedos que se murieron.
escrito en Mar./2017 aprox.