martes, 24 de abril de 2018

Aniquilación del tiempo

Mediqué a mi propia suerte con el antibiótico contra el tiempo.
Ya no entiendo los minuteros, y los caminos
se abren con el mismo desdén
que las agujas sobre el agua.
El recetario cantó lo justo: nada pertenece al pasado, nada pertenece al futuro.
Solo el verbo necesita de él para hacerse vida.
escrito en Abr./2018

sábado, 21 de abril de 2018

Esta es mi respuesta

Amanezco poesía en tus manos
La lengua cuenco trae el brebaje
Te recreaste
Para sanarme
Ahora estoy curada de mí
El más hiriente fantasma
A veces enloquezco pero
Tarde o temprano regreso
Y ahi estás (de nuevo)
Parado
Recostado sobre una columna
Esperando que baje y te cuente
Los secretos de mi espesa llave
Dios por qué acaso repito tantas veces
La palabra dios
Como una exclamación
Una fiebre
Algo más que la explosión
Y ahí estás de nuevo
Como siempre
Camino a darme lo mejor del infinito
escrito en Jun./2017 aprox.

viernes, 20 de abril de 2018

Los complementos

Parezco una perseguidora de utopías a través de un río
cuyo bracito llega hasta mi pueblo
y la utopía tiene forma de barrilete
y sé que aquello luminoso en el río de noche, del otro lado, es Bella Vista.
Y me desnudo y voy corriendo hasta la arena
donde me tiro cara al cielo y veo una galaxia completa
porque la oscuridad se traga todo y no convida, dice Cabrera,
pero la oscuridad en este lugar
me convida constelaciones que no veo en la ciudad.
Sin embargo, la luz altísima
devora solo los peldaños del tiempo,
y no convida el universo:
lo hace piel de todos y fecundador del amor.
escrito en Dic./2017 aprox.

jueves, 19 de abril de 2018

Idiomas

Las flores de mi boca ya fueron hasta tu boca
en forma de onda bifurcada, serie de paréntesis que dicen nada,
hasta beberme a mí misma en tu boca
disociarme a cuentagotas en tormentosos vientos.
Transformando la piel en esponjas naturales
en vacíos receptivos
en manos que me tocan me tocan me tocan mil manos
que me rehacen.
Mi piel derrama arcilla fresca, mientras me dibujas los pliegues y las sombras,
el fruto de mi cuerpo y sus semillas,
en el cual vas a regar con tu miel la magia y el ritual
de millones de tribus que vivieron y viven
en cada parte perdida de continentes lejanos,
donde huelen a bosque, a mar, a humos de palo santo
donde observan seres extraños de otras dimensiones llegar en el cielo,
donde observan el cielo y lo describen en idiomas que ahora entendemos porque nos dejamos fluir.
Logbeki es la estrella de tu alma.
Oknwlapo es la caída terrestre de los astros (por ejemplo, allí, a tu lado, acaba de caer un magnetar).
Guuhka es la simbiosis entre la eternidad y las nubes que la persiguen.
Pkwijobb es el elemento esencial de toda vida.
Lkoimo es el rayo violeta de la tormenta.
Lonbkga es el sol escondiéndose en el horizonte de nuestros ojos.
Cafgripo es la negrura pre lluvia en invierno.
Hdkidi sos vos sos vos sos vos que sos todos los cielos juntos en un mismo instante cuanto me tocas y te toco cuando te miro a los ojos cuando cielo sos cuando las flores de tu boca ya no están.
escrito en Abr./2017 aprox.

miércoles, 18 de abril de 2018

El fango de la suerte inquieta

Y si huele a río tu mano rozando
una de mis piernas.
Y si huele a río la siesta propinada
por las voces
y las almas de un nuevo día.
Y si huele a río el paso tranquilo
de la creación.
Y si huele a río un disco que suena despacio
en auriculares viajeros
que mezclan dos mundos.
Y si todo huele a río porque el río está cerca,
creceré como el cielo para ver uno a uno
los peces que sentencien
el algoritmo ambicioso del deseo.
Y si todo huele a río quiero volver a ser agua
dulce y preciada, ruidosa,
recostándose en tu barco.
escrito en Mar./2017 aprox.

lunes, 9 de abril de 2018

Soy el poeta

Sacudió el libro lleno de tierra
leyó cada palabra como consumiendo mundos
hambriento
petrificó sus miedos y los tiró
en una bolsa de residuos.
Era de lo más lindo verlo leer entusiasmado
inmerso en el viaje paciente de la imaginación,
todo eso
me invitaba de a ratos a vencerme
porque no hay nadie que pueda
contra las palabras escritas así
cual hechizo sangrante de misterio.
Y después el hechizo pasó a ser parte de lo real,
de la cocina, de la mesada, del mate nuevo,
de la mano en mi cintura y de las palabras ahora dichas,
"...Debo justificar lo que me hiere
no importa mi ventura o mi desventura,
soy el poeta";
así le cabía Borges en una mano y en una boca
la sentencia de la fantasía en la que yo termino creyendo
como bolilla de sorteo que siempre es buena suerte
y es anhelo y ya no importan las letras,
y no importa vencerme porque igual gano en el podio el mayor misterio,
la mejor locura,
ningún premio, todos los premios, ningún hechizo,
todos y cada uno de ellos,
el libro ahora limpio, casi sin polvo en su tapa,
la cama revuelta
la magia cerrándonos la puerta.
escrito en Dic./2016 aprox.

domingo, 8 de abril de 2018

Palabras medio, palabras camino

Podría decir con vehemencia que encontré la salvación en un trozo de instante.
Podría decir con seguridad que los kilómetros son la nada misma, que la distancia pierde su sentido y concepto como tal en esta sintonía.
Podría decir con exaltación que encontré la llave del mandala y giré hacia él, como laberinto y como apertura, como un río metafísico, como dualidad sin quietud.
Podría decir todo lo que el lenguaje me permita, con palabras simples como los días.

Podría también callar,
perdurar y ser vidente, confiarme,
creer que todo está dicho.

Podría empezar a gritar los verbos que lo envuelven y sonreír cuando deba llorar para confundir al aire y sentirme lluvia caprichosa.
Podría verlo inmenso y febril, sobre mis pechos, mirándome como si mirara una pintura de Klimt y sus ojos estuvieran llenos de oro.
Podría reconocerlo aun entre millones de personas y personajes con solo cerrar los ojos y visualizarlo como yo quiero; los abriría y allí estaría, frente a mí.
Podría regar con savia sus filamentos más nobles y rogarle que sea mar para lamer su sal y ahogarme por siempre en él.
Podría inventar el siempre y que la eternidad se llame infinito y se apellide hoy.
Podría hacer todo lo que siempre pude, pero no sabía que podía hacerlo y entonces ¡eureka! puedo porque lo amo y lo amo porque puedo amar todo lo que se abra como el cielo, todo lo que se libere como el instinto, todo lo que se absuelva como el viento, todo lo que vuele como las semillas, todo lo que renazca en el arte y brille candente con su tercer ojo.
Podría dejar de escribir sobre esto y sólo sumergirme en él como hago desde hace siglos... Las partículas se han encontrado, el entrelazamiento cuántico perenne ha desembocado en armonía, podría dejar de escribir sobre esto, pero las palabras trajeron a nuestras almas al reencuentro, y entonces palabras medio, palabras camino, palabras tránsito y palabras destino, siempre serán el amuleto.
escrito en Sep./2017 aprox.

viernes, 6 de abril de 2018

Hvarf

Desaparecer detrás de la nada
que viene escapando del todo,
hacer una pirueta en el aire y caer
hacia arriba.
El todo gana, envuelve,
la nada queda, se transparenta.
Desaparecer de lo que parece,
actuar en lo que posee parecido,
reaparecer en la última
luz
del
ocaso.
Desaparecer de la manada y hacerme
huérfana
del todo.
Eso quiero.
escrito el 04/Abr./2018

miércoles, 4 de abril de 2018

Soy lo que soñé hace siglos

Otra noche penetrante de grillos
acude a lastimarme con su santo uniforme.
¿Dónde dormiría mi enorme franqueza?

Soy lo que soñé hace siglos;
te vi llegar y me anestesié de verbos.
Hablame
vestime de mantras
que necesito algo más que el ruido.

Me acabo de derrumbar la puerta,
salí de mí y descubrí una niña,
cuando mujer se devora,
cuando púber se enreda,
cuando pequeña se evapora.
Dame un centavo de deseo
que yo lo hago voraz fuego.

Así son las cosas, piedad.
Me dicta un grillo su prosa;
yo sólo le encomiendo la muerte.
escrito en May./2017 aprox.