miércoles, 25 de octubre de 2017

Vomitarse

Tarea para el hogar:
Autoinducirse. Provocarse.
Meter dos dedos en la boca de la inconsciencia para vomitar.
Vomitar hasta que no haya nada y se expulse bilis.
Hasta que una saliva amarillenta marque el fin.
Listo.

Para la próxima clase:
Traer un puñado de poesía post exorcismo. No está permitido morir en el intento.

escrito el 21/Oct./2017

jueves, 19 de octubre de 2017

Indecible

En complot con el fuego, me llamás
y me escribís en un sueño,
desde el cual surgen duendes raros
que no conocen la belleza y aceptan
mis manos huecas para enseñarles a jugar.

En ese sueño de visiones de arcoiris y bufones,
de búsquedas y encuentros, me llamás
y me escribís para celebrar lo desconocido
y lo que no nos podemos decir con palabras.

En complot con el fuego, nace un poema
que genera en mi cuerpo el alma
de toda combustión.
escrito en May./2017 aprox.

jueves, 12 de octubre de 2017

Mientras uno sopla

El candado se destraba con el despertar inevitable
que emerge desde un punto luminoso en el centro del pecho.
De ahí al caos hay un solo y estrecho paso.
Las puertas se abren con el deseo inexorable
que se genera en la palma de la mano ansiosa
y que se desarrolla y crece en cada segundo
como una burbuja de jabón mientras uno sopla.
Si esto tuviera nombre se llamaría desvelo,
si esto tuviera definición, sería la misma que la de la pólvora.
Si esto tuviera sentido alguno, no estaríamos acá,
tan sucios, increíbles, enfermos y curiosos,
no se nos acalambraría la mente tratando de observar el todo
desde una perspectiva lejana y continua y expansiva,
ajena a nosotros, tan nosotros como externa.
Si esto tuviera un camino estipulado sería una farsa.
Pues el mundo, oigan, es eso que pica por todo el cuerpo y nos involucra,
es llenarse el culo de preguntas y mezclar las respuestas adrede
para nunca saber nada.
Si esto tuviera comienzo y fin,
nunca existiría el eterno ahora.
escrito en Abr./2017 aprox.